La felicidad de tu gato es, junto con un buen estado de salud, uno de los elementos básicos de su bienestar. Además, el hecho de que tu gato sea feliz también es esencial para vuestra relación y para una buena convivencia en casa, ya que el estado de ánimo del animal afecta notablemente a su carácter y comportamiento.
Aunque no pueda comunicártelo con palabras, puedes ver si tu gato es feliz a través de su conducta y de algunos signos externos, por ejemplo:
- Uno de los signos principales de un gato feliz es que mantenga sus hábitos diarios (asearse, jugar, dormir, beber, etc.) y los realice con normalidad.
- Otra señal suele ser que ronronee, especialmente mientras lo acaricias. Eso sí, ten en cuenta que también puede hacerlo cuando siente miedo o dolor, así que, en algunas ocasiones, tendrás que fijarte en otros indicios para asegurarte de que su ronroneo es debido al bienestar.
- Si corretea por la casa o el jardín sin motivo aparente, también está demostrando su alegría y vitalidad.
- Cuando tu gato es feliz, es habitual que mantenga la cabeza hacia arriba y la cola erguida también en esa dirección, a menudo con la punta un poco doblada.
- Otro signo de felicidad y de que se siente seguro es que se estire panza arriba y con las patitas en el aire.
- Si se comunica contigo con maullidos largos y agudos, suele ser porque está contento y te lo quiere demostrar.
- Los ojos de tu gato también pueden darte muchas pistas de su estado de ánimo. Si los entrecierra al mirarte es porque te aprecia y si sus pupilas se dilatan significa que está muy contento.
- Sus ganas de jugar y el hecho de parecer muy concentrado durante el juego son otros indicativos de que el animal está contento.
- Un buen apetito también es un signo de un gato feliz. Aunque debes tener en cuenta que, si no quiere comer, no es necesariamente porque esté triste o enfermo, también puede ser que su comida no le guste. Recuerda que los gatos suelen ser exigentes con su dieta, por eso una alimentación de calidad, equilibrada y sabrosa es siempre una buena elección.
- Por último, el hecho de que quiera mimos y se frote contra ti, a no ser que sea una gatita y esté en época de celo, es un buen indicativo de que tu gato es feliz y la relación va sobre ruedas. .